Hace más de un año que no escribo en este blog. Han pasado tantas cosas
desde entonces.
Estoy seguro de por que estoy escribiendo este post, lo estoy
totalmente. 2018 fue hasta ahora, el mejor año de mi vida, de eso no quedan dudas.
Viví unas experiencias inolvidables y pude conocer nuevos lugares.
El motivo principal de este post, es hablar sobre algo, es como si fuera
una fuerza, una energía en tu interior que te hace sentir que algo bueno va a
pasar, esa sensación de cuando haces algo bien y sentís que va a salir bien.
Recuerdo que en 2017, estuve aplicando para una oportunidad muy importante
para mí, estaba super nervioso, estaba super ansioso, y una profesora de ingles
super especial para mí, me dijo algo que creo que jamás voy a olvidar ahora: “Si
es suyo, ni aunque se quite, si no es suyo, ni aunque se ponga”.
Creo que esa frase tiene mucha razón. Hay ciertas cosas en la vida que
ya están dadas a pasarnos, los puntos se unen perfectamente para llevarnos al
resultado que vamos a obtener. Las cosas pasan cuando tienen que pasar. En todo
el tiempo en el que estuve buscando esa oportunidad, yo sentía que iba bien, yo
tenía esa “corazonada”, esa sensación de que ya estaba prácticamente seguro de
que las cosas se iban a dar. Dos meses después de que mi profesora de ingles me
dijo esas memorables palabras, recibí la gran noticia: la oportunidad se me
dio.
Ahora, en 2019, estoy pasando actualmente por otra situación parecida.
Actualmente ya pase dos barreras, y ambas las pude pasar. Ahora, estoy esperando
una respuesta, desesperadamente. Estoy impaciente, ansioso… Esperen, ¿como en 2017?. Efectivamente. Nuevamente siento esa increíble sensación de
seguridad y convicción en que la oportunidad se va dar. Es una oportunidad muy
grande, demasiado grande, y estoy ansioso, muero de ganas de que ya suene el teléfono
y sea esa llamada que espero con la buena noticia.
Estas próximas 3 semanas que
vienen, si, serán de mucha tensión quizá, también estoy muy ansioso por saber que
obtuve esa oportunidad, pero habrá que esperar. Estoy seguro de que esa
oportunidad es mía.
No queda nada mas que esperar lo mejor, sé que vendrá lo mejor, es una
oportunidad grande, y la fe es importante, y tengo mucha fe en que así será. Yo
ya me vi en esa iglesia… solo eso digo, y no, no tiene nada que ver con religión.
WORK HARD, DREAM BIG.
