Con cada palabra que escribo, no puedo dejar de pensar en la tristeza que tengo el día de hoy. Hoy Portugal queda eliminada del Mundial en cuartos de final ante una histórica Marruecos que se mete a semifinales.
Hoy, el último sueño mundialista de Cristiano Ronaldo se esfuma. Hay que ser honestos y claros, yo aun siendo un fiel seguidor de Cristiano Ronaldo, de El bicho, admito que no está en su mejor momento, que actualmente no está ni entre los 5 mejores del mundo, mientras que su rival de toda la vida, Messi, yo personalmente si lo veo en el top 3 del mundo actualmente. Mientras que Cristiano en este Mundial solo ha marcado un gol de penal y no ha sido influencia positiva en el equipo, Messi está dándolo todo y apareciendo (finalmente) con Argentina.
Para mí, Cristiano Ronaldo sigue siendo el mejor de la historia entre él y Messi, más no del mundo actualmente. Hoy se abre una peligrosa brecha para definir quien es el mejor de la historia, porque si Messi hace lo suyo, este año podemos finalmente ver finalizado el eterno debate de quien es el mejor de la historia. Terrible decirlo, terrible pensarlo, pero es la realidad. Este año, puede que haya un sucesor, puede que El Bicho se deba levantar de su pedestal, para darle paso a uno que le ha venido siguiendo desde hace más de 15 años.
Aún así, el legado de Cristiano no se va a comparar al de nadie JAMÁS, nunca en la historia. Ni siquiera entre Messi y Cristiano, porque lo de Messi es natural, mientras que lo de Cristiano es una muestra perfecta de lo que es la vida si uno se esfuerza y tiene una mentalidad de hierro.
Hoy es día de reflexión y realización, de que el mejor de la historia, quizás tiene que dar un paso atrás por el bien de su carrera. Gracias por estos años de golazos y jugadas increíbles, por dar Champions a tu equipo favorito y por ilusionar a portugueses y no tan portugueses a que se puede ganar un Mundial. 37 años no es poco. En el mundo del futbol, tener 37 años, convertido a persona, es tener 85.
Fan del bicho por siempre y a muerte.
Para mí, hoy muere el Mundial. Ya no habrá la misma expectativa, ni la misma emoción. Adiós Catar.
